Veneno de abejas

Terapia con Veneno de Abeja: Cuando lo que envenena también sana

Durante siglos, la palabra veneno ha resonado en nuestro imaginario colectivo como sinónimo de peligro, dolor e incluso muerte. Sin embargo, en el maravilloso campo de la apiterapia —el uso terapéutico de los productos de la colmena— este concepto experimenta una transformación asombrosa. Lo que una vez fue temido como agente de ataque se revela ahora como un aliado poderoso para aliviar sufrimientos, restaurar funciones del cuerpo y, en ciertos casos, contribuir activamente a procesos de curación profunda.

Este cambio de perspectiva no es solo poético, sino profundamente científico. Detrás de cada picadura controlada, meticulosamente aplicada por profesionales capacitados, late un secreto milenario entregado generosamente por las abejas: su veneno, conocido como apitoxina, un complejo bioquímico de extraordinaria potencia y precisión.

¿Qué es, entonces, este elixir natural que despierta tanto interés en la medicina integrativa?

El veneno de abeja es un líquido claro y de reacción ácida, compuesto aproximadamente en un 88% por agua pura, lo que le confiere fluidez y facilidad de difusión en los tejidos. Pero su verdadera magia reside en el 12% restante: una sofisticada mezcla de moléculas biológicamente activas que actúan en sinfonía sobre el organismo humano.

Veneno de abeja
Apitoxina

Componentes

Entre las enzimas (sustancias que aceleran los procesos bioquímicos) más conocidas se destacan:
Melitina:
Estimula la pituitaria para liberar ACTH, (hormona adrenocorticotrofica) que estimula las glándulas suprarrenales para producir cortisona.
Ella actúa sobre el sistema inmunologico, ayudando a que este vuelva a reconocer las articulaciones como parte del cuerpo y no como objetos extraños que urge atacar, como ocurre cuando hay artritis.
Es un antibiótico natural 100 veces más potente que la penicilina en su actividad antibacteriana, (contra bacteria gram-negativas y especialmente contra la cepa estafilococos aureus)
Peptido 401:
Tiene un efecto antiinflamatorio 100 veces más efectivo que la hidrocortizona (reduce el dolor y la inflamación)
Apamina:
Estimula la función hipofisicorticorrenal provocando un aumento inmediato del nivel de cortisona en la sangre. Este aumento en el nivel de cortisona contribuye a los efectos antiinflamatorios del veneno de abejas y también a un significativo incremento en los mediadores cerebrales: dopamina, noradrenalina y serotonina. Esto ultimo seria responsable de la elevación anímica.
Eficaz supresora del dolor.
Otros componentes:
Hialuronidasa, Histamina, Fosfolipasa A2, Adolapina, y otros Peptidos y Aminas , ayudan en el tratamiento de muchas … muchas enfermedades.

Efectividad de la apitoxina

Artritis reumatoide:
Se supera la inflamación y el dolor
Artritis reumatoide juvenil:
Recuperación de la movilidad.
Artritis traumática, Artritis psoriática:
Efectividad: 85%, aplicaciones semanales varían entre cinco y quince, dependiendo de la antigüedad del mal.
Artrosis:
Supresión del dolor e inflamación
Efectividad: 85%, aplicaciones entre cinco y quince pinchazos semanales
Diabetes:
Efectividad: 50%
Enfermedades Autoinmunes:
Bloqueo del proceso degenerativo, recuperación total
Esclerosis Múltiple:
Bloqueo de proceso degenerativo, recuperación parcial
Efectividad: 75%. Aplicaciones semanales por uno o más años.
Esclerodermia:
Bloqueo del proceso degenerativo, recuperación total
Osteoartritis:
Supresión del dolor e inflamación
Efectividad: 85%, aplicaciones entre cinco y quince pinchazos semanales
Lumbalgias:
Supresión del dolor
Efectividad: 100%, aplicaciones semanales: tres a cuatro.
Inflamación Nervio Ciático:
Supresión del dolor e inflamación
Efectividad: 100%, Aplicaciones tres picaduras a la semana
Discopatias:
Fin del dolor y de la inflamación
Efectividad: 100%, aplicaciones semanales tres a seis

Aplicacion de apitoxina

Hombro congelado:
Recuperación total
Efectividad: 100%, aplicaciones semanales, tres pinchazos
Tendinitis:
Supresión del dolor y de la inflamación
Efectividad: 95%, aplicaciones semanales cuatro a siete.
Torticolis:
Recuperación total
Efectividad: 100%, aplicaciones tres picaduras semanales.

Aplicacion de apitoxina

Otros tratamientos

La American Apitherapy Society, indica que la Apiterapia también es efectiva en las siguientes situaciones:

    • Piel: Eccema, psoriasis, ulcera tópicas
    • Infecciones: Laringitis, mastitis.
    • Vírales: Herpes simple 1 y 2, verrugas
    • Reumatológicas:
    • Bruxismo, espondilitis, codo de tenista, también los esguinces que generalmente sufren las personas que practican deportes, especialmente los futbolistas.

    • Cardiovascular: Hipertensión (crónica y aguda), varices.
    • Sentidos: Perdida de audición, vista, glaucoma, diplopia, iritis.
    • Ortopedia: Estimula la curación de los huesos.
    • Psicología: Depresión

    En muchas de las enfermedades indicadas anteriormente, se aconseja como tratamiento adicional, medicamentos en base de propóleos, polen, miel y hierbas medicinales.